Crónica de una peregrinación por tierras de Orense 2106
En la mañana del día 23 de marzo del 2016, un grupo de unos 40 peregrinos de la Asociación de Amigos del camino de Santiago de Sevilla, se dio cita para compartir un autobús y salir a caminar por tierras gallegas de Orense.
Miércoles 23;
El día amaneció agradable y con buena temperatura cuando en Plaza de Armas iniciamos nuestro viaje. Con Emilio Solís al volante, hicimos una primera parada para un café en Mérida, para continuar por la A-66 hasta Cuatro Calzadas, próximo a Salamanca, donde compartimos nuestra primera comida, el lugar se llama Mesón Viejo del Jamón, y es una delicia parar a comer en ese lugar. Con las necesidades alimenticias cubiertas, partimos de nuevo, El Castillo del Buen Amor, lugar de inigualable belleza situado en plena dehesa de Salamanca, hoy reconvertido en hotel, donde pudimos visitar sus murallas, sus patios y la torre del homenaje, donde el obispo Fonseca acomodó a su familia haciendo del lugar un palacio dentro de la fortaleza militar. Con un café y muchas fotos volvimos a la ruta para continuar por la A-52 destino Orense y el hotel Auriense donde tendríamos nuestra base logística de, alojamiento y cena. Allí fuimos recibidos por José Luis Rodríguez Cid, presidente de los Amigos del camino de Orense, con el que pudimos compartir un aperitivo a nuestra llegada.
Jueves 24;
A las 09’00 horas y tras el desayuno nos pusimos en camino a la población de Verín, Laza y Campobecerro, para iniciar la primera de nuestras etapas a pie. La dificultad de las carreteras locales de montaña de la zona, unidas a las obras de construcción de los tunes del futuro AVE de Galicia, hizo que el autobús no llegase hasta Campobecerro, lugar de inicio de la etapa, dejándonos a unos dos kilómetros de Puerto Camba, desde donde tomamos el camino señalizado. Una agradable bajada de 14 kilómetros por la ladera de la montaña, nos llevó hasta Laza, población situada en un fértil valle, donde pudimos encontrar todos los servicios necesarios para retomar aliento y alimento. Esta etapa partía desde lo más alto de la sierra Seca a una altitud de unos 1150 metros hasta bajar a Laza a 482 metros, en un cómodo paseo. Tras reponer fuerzas en la localidad, nos desplazamos para visitar el Castillo de Monterrey, fortaleza hoy reconvertida en parador nacional de turismo, de inigualable belleza por su situación y su conservación. Allí pudimos visitar su recinto amurallado, su palacio de los condes, la torre de la Dama, su iglesia, la torre del homenaje y su hospital de peregrinos. Un magnifico lugar para una foto de familia en una dorada tarde de primavera.
Viernes 25;
Hoy caminaremos una etapa completa, desde la localidad de Laza a la de Vilar de Barrio, 21 kilómetros de camino por tierras gallegas, donde encontramos pintorescas poblaciones, como Soutelo Verde o Alberguería, una dura subida desde el valle de Laza y una placida bajada a la llanura de Limia, el tiempo siguió acompañando a los caminantes y a la llegada a Vilar de Barrio pudimos admirar varios ejemplares de Canastros (hórreos) gallegos de magnífica conservación. Con la alegría del trabajo bien hecho, nos dirigimos para hacer una breve visita a la ciudad de Allariz, donde pudimos pasear por la ribera de su río, el puente medieval y sus concurridas y turísticas calles, llenas de comercios, bares y museos. Plaza Mayor y su parroquia románica.
Sábado 26;
El día se presentó lluvioso, por lo que un grupo de los participantes decidió no hacer la etapa y quedar todo el día visitando la ciudad de Orense, los demás, pertrechados con capelinas y paraguas, nos dirigimos al inicio de la etapa, esta estaba prevista entre Vilar de Barrio y Xunqueira de Ambia, por la llanura de Limia. Debido al estado climatológico de la jornada y pensando en volver al hotel a cambiarnos de ropa antes del paseo por la ciudad, decidimos acortar el camino, iniciando este en la localidad de Bobadela a Pinta dejando la etapa en unos cómodos 6 kilómetros de “corredoiras” verdes y húmedas, llenas de encantos, musgo y helechos. Una corta etapa para disfrutarla y saborearla con tranquilidad donde las cámaras de fotos no dejaron de trabajar. La tarde en Orense Ciudad, donde el grupo se diluyó entre sus calles, para visitar las Burgas, Plaza Mayor, Catedral de San Martiño, Puente Romano, Termas y calles comerciales. Allí fuimos agasajados por Los Amigos del camino de Orense, con vino de Ribeiro y pinchos de Ibérico. El Pórtico del Paraíso de su catedral Un lugar especial para terminar unos días de camino por tierras de Orense.
Domingo 27;
Después del desayuno, pusimos camino a Sevilla, con sonrisas y los recuerdos vividos, iniciamos el retorno a casa. Encontramos nieve en el Padornelo y volvimos a comer en Cuatro Calzada, para visitar en la tarde el Monasterio del Palancar en tierras de Cáceres, donde nos hicimos la última foto de grupo tras visitar el “conventito” donde vivió San Pedro de Alcántara. Parada de nuevo en Mérida y llegada a Sevilla sobre las 22`00 horas, para buscar cada uno su hogar y soñar de nuevo con volver al camino.