Salida de fin de semana a la Vía de la Plata. El sábado, 17 de febrero, etapa entre Mérida y Aljucén y el domingo, 18 de febrero, etapa entre Aljucén y Alcuéscar.
Como es habitual quedamos en Plaza de Armas. En este fin de semana continuamos andando por Extremadura, con la particularidad que el domingo dijimos adiós a la provincia de Badajoz y entramos en la de Cáceres.
El autobús paró a desayunar entes de Monesterio, una vez terminado el desayuno, continuamos hasta Mérida. El autobús nos dejó en la salida de Mérida por la N-630, al lado de una gasolinera, para recorrer un breve trecho y coger el Camino, en la siguiente rotonda, por un carril verde, que nos llevó al Embalse de Proserpina, el cual abastecía a Emérita Augusta de agua. Lo bordeamos, pasando por delante de varios chiringuitos, todos ellos cerrados. En el embalse se estaba celebrando una competición de pesca. A continuación tomamos una estrecha carretera, la seguimos durante un buen trecho, la abandonamos por un camino muy ancho a mano izquierda. El recorrido hasta Aljucén es por una hermosa zona de dehesa, por caminos de tierra y arena, entre carrascos, pasando por fincas con ganado lanar, llegando a El Carrascalejo.
Allí hicimos una pequeña parada en el bar del albergue municipal de peregrinos. A la salida de El Carrascalejo nos encontramos con un cruceiro con la cruz de Santiago, más adelante desembocamos en una carretera que seguimos unos doscientos metros para a continuación cruzar por un túnel la A-66 y llegar, más adelante, a Aljucén. En la entrada a la población, hay azulejos con la vieira en la calzada y otros azulejos en la acera, del Camino de Santiago y ya en el pueblo una escultura de Santiago vestido de peregrino. Por el pueblo hay muchos detalles relacionados con el Camino.
Por la tarde nos desplazamos con el autobús a Alcuéscar, a la Casa de la Misericordia de los Esclavos de María y de los Pobres, orden religiosa de carácter asistencial, en cuyo albergue nos alojamos. Allí cenamos, dormimos y desayunamos, teniendo una acogida fantástica por la comunidad religiosa, donde les parecía poco lo que nos ofrecían, abrumándonos con su amabilidad el Padre Paco, el superior, el padre Fernando y el hermano Agustín. Desde aquí les quiero volver a darles las gracias por todo.
A la mañana siguiente el autobús nos llevó a Aljucén para hacer la etapa de Aljucén a Alcuéscar.
Salimos de Aljucén por la Calle Real, la cual nos lleva a la N-630, cruzamos el río Aljucén y antes de llegar una gasolinera abandonada, giramos a la derecha por una pista de tierra, con una cruz de Santiago y los cubos de Alba Plata. Avanzamos por ella por bonitas dehesas, caminábamos por el interior del Parque Natural de Cornalvo. El fin del parque coincide con el límite provincial de Badajoz y Cáceres. A partir de aquí, ya en la provincia de Cáceres, iniciamos un paulatino ascenso en el que fuimos ganando unos trescientos metros de desnivel hasta llegar a Alcuéscar. Antes de llegar, nos encontraremos con una cruz de piedra, es la Cruz de San Juan. A partir de aquí se acentúa el ascenso hasta un pequeño collado, donde tomamos el desvío de la derecha para encaminarnos a Alcuéscar, vemos a lo lejos la torre de la Iglesia de la Asunción.
En cuanto a la climatología fue estupenda para caminar. Por la mañana hacía fresco, pero según iba avanzando la mañana la temperatura fue subiendo y tuvimos que desprendernos de alguna capa de ropa, Al medio día la temperatura era alta para la época en la que estamos.
Y sin ninguna novedad regresamos a Sevilla.
Fdo. Luis Gutiérrez (Vocal de Actividades - Asociación de Amigos del Camino de Santiago de Sevilla "Vía de la Plata"-)